¿Has echado ya mantillo a tu jardín?

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¿Has echado ya el mantillo a tu jardín? Todavía no, pues aprovecha que ha llegado el momento de nutrir tu suelo.

Si no conoces qué es el mantillo, esta es una definición rápida de su significado: Es una capa de material aplicada sobre la superficie del suelo, principalmente para modificar los efectos del clima local. Existe una amplia variedad de materiales, tanto naturales como sintéticos.

¿Para qué sirve el Mantillo o abono?

  • Conservar la humedad
  • Durante el invierno evita que las heladas o escarchas entren en contacto con el substrato y perjudiquen a las plantas.
  • Mejorar la fertilidad y la salud del suelo
  • Reducir el crecimiento de malezas
  • Decoración. Mejora el atractivo visual del jardín

¿Cuántos tipos de mantillos hay?

Normalmente el mantillo está compuesto por materia orgánica y puede ser astillas en corteza, o  coberturas de estiércol o compost que se incorporarán de forma natural en el suelo por la actividad de los gusanos y otros organismos.

Hay diferentes tipos de mantillo:

  • Mantillo de tierra: Están fabricados con césped de prado, tienen el aspecto de un fino suelo de jardín, retienen el agua y contienen nutrientes. Son recomendados para plantas de larga vida, como árboles o arbustos.
  • Mantillo sin tierra: Compuestos por turba o sustitutos, al carecer de tierra son muy limpios, ligeros y fáciles de manejar, pero con menos nutrientes que los fabricados con tierra. Recomendados para plantas de vida corta.
  • Mantillo para ericáceas: Tienen un pH muy bajo, lo que les hace ser recomendable para plantas que detestan la tierra calcárea.
  • Mantillos comerciales especiales: Están hechos con cactus y plantas alpestres, poseen una elevada proporción de gravilla, por lo que ayuda a conseguir un buen drenaje y son muy pobres en nutrientes.

 

Ahora que ya conoces los beneficios del mantillos. Si deseas más información o presupuesto.  ¡No dudes en llamarnos !



 

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